Suenan las campanas,
suenan los tambores,
suenan las trompetas,
bailan los señores.
Todos los borregos con su alegre melodía,
inmunda masa entumecida,
sus balidos al unísono; banal y futil vida.
Canta el genio en mi cabeza
gimen las guitarras, dejo la puerta abierta al climax
percusiones hacen que me hospede con la magia, y me fascino
a ritmo de baile embriagador.
Me dejo llevar, me dejo llevar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario